Convertir un simple cristal en un espejo es un procedimiento extremadamente sencillo. Sólo necesitas limpiarlo bien y darle una capa de espray brillo espejo por una de sus caras. Se le puede dar varios acabados. Así puedes convertir una vieja vidriera en una pieza única de decoración.
En esta web podéis encontrar más fotos y explicación detallada de los pasos. Una inversión mínima para un resultado excelente. Un espejo así te puede costar 200 euros en una tienda de decoración.